Comenzó a dar la merienda a niños carenciados de su barrio hace casi dos años sacando dinero de su bolsillo a pesar de sus propias dificultades económicas. Hoy sueña con tener un espacio físico para albergar a los pequeños, por eso inició la campaña “un bloque para el Merendero Nissi”.
Su nombre es Águeda Preza, se mudó a Ciudad del Plata hace algunos años atrás y la idea de crear un merendero surgió “al ver la necesidad de las familias del barrio” (Autódromo), y su interés en poder ayudar.
“Una vecina me contó que todos los días una familia le preguntaba si le sobraba pan, otra vecina me comentó que algunos niños iban a visitarla y le pedían alimento y así un día también llegaron a mi casa, vi niños con bajo peso, y dificultades varias y trataba de ayudar en la medida que podía, así que me pregunté que más podía hacer”, contó Águeda.
“Tengo mucha fé, soy cristiana y empecé a preguntarle a Dios como podía ayudar a las personas, yo no contaba con las condiciones para ayudar a todos, pero pensé que sí, podía dar una merienda, y el 5 de Diciembre de 2015 abrí mi Biblia y justo leí un pasaje que decía: ‘ayuda al pobre y necesitado en tu tierra’ y dije está bien Dios, hoy es el día que empiezo”, expresó.
Y prosiguió contando que desde el primer momento “le avise a dos buenas amigas, Roxana y María Noel, que iba a comenzar con la merienda, y al principio hasta mi madre me dijo que estaba loca. El frente de mi casa aún era de madera, trabajaba como costurera haciendo ropa de bebes y niños y vendiendo en las pañaleras de la zona, y nadie entendía como yo pretendía ayudar a los demás, pero me propuse hacerlo, era un sueño que estaba en mi corazón hacía mucho tiempo”.
Actualmente el merendero atiende a 25 niños de forma permanente, pero ha llegado a atender a 40. Funciona de la siguiente manera: martes y jueves a las 17:30 horas Águeda entrega la merienda a los niños para llevar (por falta de espacio físico para brindar el servicio en días de invierno), y los sábados a las 10 de la mañana, realizan un desayuno todos juntos en su casa.
La mayoría de los alimentos son elaborados por ella misma. En un principio no contaba con ningún apoyo, pero desde hace algunos meses la Intendencia dona por mes 6 kilos de leche en polvo, 10 kilos de azúcar, 2 kilos de cocoa, avena y maicena, y vecinos y organizaciones del medio colaboran de vez en cuando con otros ingredientes para elaborar las meriendas, así como también ropa y calzado para los niños.
“Nos urge tener un espacio físico adecuado, actualmente la merienda es al aire libre por eso se entrega para llevar entre semana por el frío”, explicó Águeda, y continuó diciendo “tenemos una campaña ‘un bloque para merendero Nissi’, ya que si todos donáramos un bloque que sale $20 pesos, fácilmente podríamos hacer una habitación y un pequeño baño, eso, lo básico”.
La brigada solidaria del SUNCA ya comprometió la mano de obra para levantar el local, y la Intendencia donaría chapas para el techo, por lo que faltaría el reto de materiales y bloques para concretar el especio, en el que Águeda espera también poder brindar apoyo escolar a los chicos, entre otras actividades.
Quienes deseen colaborar, pueden comunicarse al teléfono 093 527 711, o visitar la página de Facebook del merendero, Merendero Nissi.
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*Aporte: Jennifer Rivero