La Policía logró convencerlo y liberar a todos los rehenes. Luego salió, se sacó la campera y se entregó a los efectivos.
Se trata de un caso de violencia de género. El hombre ingresó a la peluquería donde trabaja su ex pareja, a quien amenaza con un arma, y retuvo como rehenes a unas 10 personas.
Varios móviles policiales sitiaron el lugar y un negociador del Ministerio del Interior mantuvo contacto con el hombre armado para que se entregue.
Al llegar la Policía el hombre disparó contra los efectivos. No hirió a nadie.
Fuentes policiales en el lugar dijeron a Subrayado que el hombre golpeó a su ex pareja y al menos efectuó un disparo dentro del comercio.
La Policía contactó a los familiares del agresor y una hermana llegó al lugar para intentar convencerlo de que se entregue sin herir a nadie.
En un momento la Policía vio a una mujer con una niña en el techo de la peluquería y de inmediato montó un operativo para rescatarlas.
Varios policías ingresaron por la parte de atrás del comercio, desde la casa de un vecino, y desde allí rescataron a la mujer con su hija pequeña.
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*Fuente: Subrayado Foto: El Observador
