Bajo intensas precipitaciones, se llevó a cabo este lunes en la ciudad de San José de Mayo, la 24a. Marcha de Silencio.
La de la capital maragata es la marcha más antigua del Interior del país; al primera de ellas se llevó a cabo tan solo un par de años después de la de Montevideo.
Tras la habitual concentración en la Plaza Treinta y Tres, los participantes transitaron por calles 25 de Mayo y Ansina, hasta la Plaza de los Mártires de la Democracia, ubicada en Ansina y Bentancur.
Luego de entonarse ‘a capella’ el Himno Nacional -debido a las lluvias, no fue posible utilizar la amplificación- hizo uso de la palabra Juan Martín Durán, dirigente del Plenario San José del PIT-CNT.
La proclama leída tuvo forma de carta a Luisa Cuesta, histórica militante por la causa, fallecida en noviembre del año pasado sin poder conocer el paradero de su hijo, Nebio Melo.
«Esta es una de las Marchas del Silencio más duras que me ha tocado vivir. Verdaderamente se nos hace cuesta arriba, sabiendo que Cuesta no va a adelante», comenzó diciendo Durán.
«Con la soberbia y la impunidad de siempre, pero con el descarto que hacía tiempo no veía, los altos mandos militares han vuelto a mostrar su verdadera cara, con declaraciones que desdeñan la voluntad del pueblo y sus instituciones. Amenazantes, altaneros, antidemocráticos, en fin, golpistas», afirmó seguidamente.
Sin embargo, opinó que «es mejor que se sepa quién es quién. Hemos escuchado hablar mucho de tribunales de honor, ética militar y otro montón de infamias más. Pero no entiendo dónde está la ética y el honor de impedirle a un compatriota reencontrarse y así poder despedir a un padre, a una hermana, a un hijo. Tal vez alguno lo pueda explicar», consideró.
«O los honorables senadores que no vieron en la conducta de cuatro de esos militares motivos suficientes para dictaminar su retiro obligatorio», subrayó.
«Es triste que después de tantos años de democracia, todavía haya quienes no puedan ver más allá de su bandera y por disputas electorales o para cuidar su silloncito, se conviertan en cómplices de un pasado terrible», sentenció.
Durán dijo que el espíritu de Cuesta «está presente en los miles que marchamos a lo largo y ancho del país» pero particularmente en «los jóvenes que suman año tras año y que mantendrán viva la llama».
«A pesar de su ausencia, sepa que está más viva que nunca. Porque los que quedamos de este lado no vamos a ir aflojando. Y usted que murió peleando, vive en cada compañero», cerró el dirigente.
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