Fue en el marco de una actividad de evaluación de los actuado por el organismo durante la última década realizada en Museo Departamental.
«Porque cambiamos la matriz energética pudimos bajar costos en 500 millones de dólares. Esos 500 millones de dólares nos permitieron hacer inversiones, guardar plata en el fondo de estabilización, mejorar salarios, hacer transferencias, en definitiva, gestionar mejor», destacó el jerarca. «Y al mismo tiempo bajaron las tarifas», aseguró Gonzalo Casaravila.
Al respecto, Casaravilla indicó que en los últimos 10 años y con respecto al Índice de Precios al Consumo (IPC), «bajaron 21% en promedio».
«Es una discusión que tenemos desde hace años: cómo puede ser que algo que ajusta, convenga. Bueno, cuando uno reflexiona que si le ajustan el salario por del debajo del IPC, pierde, también tendría que razonar que si le ajustan las tarifas por debajo del IPC, gana», explicó.
Pero además, sostuvo que también tuvieron una rebaja si se las compara con el salario real.
«En este tiempo, el salario mejoró 28 por ciento, por tanto estaríamos hablando de una mejora del 49 por ciento con respecto al bolsillo de los asalariados», afirmó.