Su presidente, Geraldo Reyes, destacó que el establecimiento lleva la actual emergencia sanitaria sin mayores inconvenientes.
«Dentro de la anormalidad, normal. Desde el primer día cortamos las visitas y eso nos ha permitido no tener ningún abuelo con problemas» resaltó Reyes, quien indicó que hasta el momento no se ha dado ninguna situación que haya ameritado la necesidad de realizar hisopados tanto sea a residentes como funcionarios.
No obstante ello informó que, en el marco del abordaje que el Ministerio de Salud Pública lleva a cabo en los geriátricos de todo el país, todos ellos serán testeados.
«Al principio (el corte de las visitas) provocó ciertas resistencias, pero hoy en día recibimos el agradecimiento de los familiares cuando ven lo que ha pasado en otros lados», señaló.
«Antes de que llegaran los instructivos de las autoridades, nuestro director técnico Dr. Marcelo Levrato, nos dio una serie de pautas que pusimos en práctica en forma inmediata, y eso repercutió en que hoy en día estemos bien», insistió.
El directivo también destacó el compromiso que ha existido en el personal del Hogar, que ha adoptado todas las medidas que son recomendadas para evitar que por su intermedio ingrese el COVID-19 ingrese a las instalaciones. «Está muy compenetrado», subrayó.
Reyes también destacó que tanto las visitas como algunas actividades -como fisioterapia, canto y la atención psicológica- se vienen llevando a cabo mediante videollamadas o la plataforma Zoom.
«En la medida de que el virus no llegue, que es la clave de todo esto, vamos a andar bien», concluyó.
