Este martes 30 de junio vence el plazo para que el Ejecutivo eleve al deliberativo los números del año pasado.
Se espera que las cuentas de la Intendencia del 2019 arrojen un resultado negativo. «Los números no van a ser buenos» había adelantado días atrás la secretaria general, Ana Bentaberri.
Más acá, el propio jefe comunal, Pedro Bidegain, ratificó esa apreciación señalando que «no van a ser los que todos quisiéramos».
Una vez que ingrese al Legislativo, el cuerpo no tiene plazo establecido para su análisis y consideración.
No obstante ello, es de esperar que el estudio de la Rendición no se extienda demasiado en el tiempo y se convierta en un asunto de campaña ante la proximidad de las elecciones departamentales de 27 de setiembre.
Las conclusiones que eventualmente puedan extraer los curules tienen carácter político.
De las cinco rendiciones presentadas por la Intendencia en este período, solamente la del 2018 arrojó un resultado superavitario, del entorno de los 20 millones de pesos. Las demás fueron deficitarias. Hoy se conocerá en qué grado la del 2019.