El asesor en Turismo de la ISJ se mostró muy enojado por las limitaciones a los operadores turísticos.
Eduardo Rapetti fue uno de los oradores en el acto de inauguración del Sendero Eco-Arqueológico Camino del Indio, el pasado sábado, en el balneario Kiyú.
Allí, el funcionario se despachó contra quienes, en función de la emergencia sanitaria en curso, deciden habilitar distintas actividades o, por el contrario, prohibir otras -y, por ende, controlar que éstas no se lleven a cabo- a la luz de la situación que atraviesa el sector turístico.
«Hoy tenemos que andar protocolo en mano, casi contra natura, controlando capacidades, que no se excedan los aforos, como si fuéramos la Gestapo (…) cuando por otro lado tenemos, en este momento, venta de entradas en todo el país para celebrar Halloween. Pero a nuestros operadores turísticos registrados, que están pagando BPS, que están haciendo un esfuerzo, no los podemos autorizar a que hagan una fiesta«, disparó.
«No se puede estar con doble discurso», cuestionó Rapetti, quien aseguró que el sector turístico vive un panorama «peor» que el que han tenido la lechería y el sector arrocero en recientes crisis. «El problema es que el turismo es un servicio y no se visualiza», se quejó.
“Perdonen que esté medio encendido”, se disculpó, “pero nos tenemos que encender. Y ya me han relajado por decir estas cosas, pero si me quieren relajar de nuevo, me relajan. Estoy haciendo catarsis porque no sería genuino si no digo too esto», concluyó.