«Estoy muy tranquilo» dijo el dirigente.
El profesor Marcel Slamovitz dijo este domingo que está «muy tranquilo» tras ser consultado sobre la posible denuncia penal de la que pueda ser objeto como consecuencia de las conclusiones a la que arribó la comisión investigadora parlamentaria sobre presuntas irregularidades en inasistencias de docentes durante el período anterior.
Como en ocasiones anteriores, Slamovitz aseguró que el hecho es parte de una «clara persecución sindical» y sostuvo que la acusación «no tiene ni pies ni cabeza».
«Tenemos además de los abogados del sindicato, abogados penalistas y demás. En los últimos días se amplió la denuncia ante la Organización Internacional del Trabajo, que había comenzado con nuestros compañeros de San José (…) Estamos muy tranquilos como dijo la FENAPES en la conferencia de prensa. Y vamos a ir a la Justicia Penal para que se termine este circo”, indicó.
El dirigente adelantó además que este lunes presentará una recusación con los abogados del sindicato por la separación de su cargo, que este domingo cumple 66 días y que consideró «absolutamente absurdo».
«Son ocho inasistencias, yo nunca mentí, siempre dije para qué las utilice, pero que además di horas de apoyo. (…) Es una persecución brutal (…). Vamos a esperar confiadamente. Espero volver pronto a las clases porque como ha dicho el instructor, prácticamente no tengo responsabilidad al respecto», afirmó.
«Es increíble que de la Operación Océano no salga un nombre, que de la fiesta del Partido Nacional donde se denuncia violación no salga un nombre y que nosotros desde el 3 de marzo del año pasado estemos expuestos en los medios de comunicación. Expuestos por la comisión de Diputados, que de investigadora no tiene nada porque el título dice para ver las faltas irregulares de FENAPES, entonces qué se está investigando si ya se está condenando. Esa es la pregunta que hacemos, mientras (de) violadores no se dan los nombres porque son primarios. Acá el mejor sindicato para el gobierno es el que no existe y es lo que están tratando de demostrar», señaló.
«Llevo 66 días separado del cargo con muchas ganas de volver, amparado por mi familia y el movimiento sindical«, concluyó.