En total, trabajan unas 180 personas.
Para la federación de trabajadores lácteos, Calcar genera un escenario de incertidumbre para aplicar una reestructura que afectará los puestos de trabajo.
La empresa láctea carmelitana Calcar atraviesa un momento complicado debido a la baja de exportaciones y a una pérdida progresiva de productores remitentes que afecta la capacidad de elaboración de diversos productos, tras haber sorteado una crisis financiera a principios de este año gracias la obtención de un crédito del Banco República.
Calcar posee dos plantas industriales en el departamento de Colonia: una en Carmelo, donde se elaboran productos para la exportación, y otra en Tarariras, dedicada a abastecer el mercado interno. En total, trabajan unas 180 personas. / Fuente: La Diaria – Por Francisco Abella / Foto: Carmelo Portal