El Servicio de Paz y Justicia (SERPAJ) presentó este miércoles en San José de Mayo su informe anual sobre los Derechos Humanos en Uruguay correspondiente al 2022. Fue en el Instituto Cultural Español.
A grandes rasgos, el documento se divide en dos áreas temáticas: seguridad pública y pasado reciente.
Andrea Sorondo, licenciada en Trabajo Social, dijo que en materia de seguridad pública se sigue notando una regresión del país, que busca resolver los problemas existentes mediante, por ejemplo, aumentos de penas o creación de nuevos delitos, o modificando la ley de procedimiento policial que, en su opinión, ha otorgado «una arbitrariedad y una discrecionalidad mayor» a los funcionarios a la hora de actuar.
En la misma línea, Sorondo sostuvo que la aprobación de la Ley de Urgente Consideración (LUC) fue «un mojón» que «agudizó» la situación que el Uruguay transita desde hace varia décadas y que es contraria a los recomendaciones y tratados internacionales que ha firmado.
Como contrapartida, dijo que lo sugerido es promover «políticas integrales» que aborden «todos los aspectos que hacen a la seguridad» y que incluyen los campos de la vivienda, la educación, la alimentación y la salud, entre otros.
Por su parte, y en relación al pasado reciente, Tamara Zamudio, licenciada en Ciencias Políticas, consideró que Uruguay atraviesa un «contexto bastante peligroso» como consecuencia del interés de determinados sectores de instalar la «teoría de los dos demonios, de los dos bandos, como si hubiera existido una guerra».
«Si bien en el último año hubo algunos procesamientos -que pueden tomarse como algo positivo– a raíz del trabajo que realiza la Fiscalía de Delitos de Lesa Humanidad, hay un contexto bastante peligroso por esto que decía y por otros factores, como por ejemplo el poder dar prisión domiciliaria a los genocidas mayores de 70 años que están en (la cárcel de) Domingo Arena», añadió.
Zamudio dijo que otro ejemplo de ese contexto es el proyecto de ley que permitirá resarcir económicamente a las victimas de la guerrilla. «Sin dudas que hay problemas«, concluyó.